“Ustedes no se imaginan todo lo que viví próximo a su esposa y hermana María Teresa, un enfermo de un temperamento muy cachas. El calificativo de “ebanista” (maestro en el arte de trabajar la madera de ébano) no lo tenía cualquiera. Solo se asignaba en aquellos tiempos a los carpinteros https://trevoryhrbf.csublogs.com/37308715/luis-egurrola-arakistain-para-tontos